SABIDURÍA DE LO ALTO
Muy buenos días y muchas bendiciones del Señor. Hoy Dios ha puesto en mi corazón, compartir con ustedes, sobre esta palabra mágica: “LA SABIDURÍA”. Muchas veces he escuchado esta pregunta: ¿Por qué algunas personas profesionales, aparentemente más educados, de buenos modales, etc. dañan a su prójimo, sin tener ningún temor, hacen peor que las personas que consideramos de poca educación? Pondría muchos ejemplos de la vida, seguramente usted ha visto, uno de ellos, ¿Verdad? La respuesta es muy sencilla, quien tiene a Cristo en su corazón es una persona que tiene sabiduría de lo alto: “El Señor da sabiduría a los hombres rectos, y es el escudo de los que viven con rectitud.” (Proverbios 2:7). El sabio Salomón con la experiencia que le caracterizaba recomienda: “No seas sabio en tu propia opinión; teme al Señor y apártate del mal. Él será medicina de tu cuerpo; ¡infundirá alivio a tus huesos!” (Proverbios 3:7-8). Mi propia opinión siempre querrá exaltar mi orgullo y acomodar la pa